Ella hoy no sale al parque. No tiene ganas. No tiene ilusion. Ella parece tonta pero, no lo es. Hoy ella a elegido sentarse en su terraza. La brisa hoy se ha convertido en frio. El frio del invierno que viste las calles con cristales de coche llorones. Como su cara. Hoy ella ha cambiado la sonrisa por unos ojos tristes. Esta seria y mira, casi sin parpadear a la luna. ¿Que estará pensando? ESta es hoy una pregunta que todo el que pasa y la ve se pregunta, pero ni ella sabe bien como contestarla. Prefiere seguir en su mundo, En su luna. La unica que nunca la deja sola..

Luna..

Sus niños del parque..

Hacia mucho tiempo que ella no iba a visitar ese parque. Llevaba meses sin escuchar el sonido de los pajaros acompañando los gritos de sus pequeñ@s y las quejas de sus respectivas madres porque tienen miedo de que se caigan del columpio.
Ella siempre habia tenido dos favoritos. Eran un niño moreno de unos 5 añitos de edad con el pelo revuelto y los mofletes diana perfecta para los pellizcos de alguna abuela. Tenia unos ojos verdes de niño travieso que hace juego con la mueca que se le marcaba al sonreirla. La sonreia a ella, mi otra favorita. Una niña de cabellos morenos con el pelito rizado quizas un poquito mas alta pero que no derivaria mucho de su edad. La niña en cambio tenia unos ojos negros grandes y con mucha ilusión por descubrir nadie sabe aun que cosas pero que fuera lo que fuera deberia ser algo muy emocionante para tener ese brillo tan especial. Los dos tenian algo en común y era que siempre jugaban solos.
Ella los llevaba observando muchisimo tiempo incluso los habia visto crecer. Los habia visto enfadarse y tirarse arena, escupirse de la rabia, tirarse de los pelos, morderse...pero sobre todo les habia visto hacer las paces, abrazarse y volver a jugar juntos como si nada hubiera pasado. Siempre jugaban a hacer castillos en ese parque donde la arena era escasa por lo que tenian mas merito. Ellos siempre tenian mas merito que los demás porque no tenian ni cubos ni palas, ni comba , ni cochecitos. Ellos jugaban con las manos y se ensuciaban juntos.
Ella siempre los miraba a ellos.Cualquier otra persona los veia como otros niños cualquiera que sus madres dejaban en el recinto de los columpios para poder dar a la charleta con sus amigas. Pero ella no los veia asi. Ella sabia que eran especiales. Eran sus niños del parque.
A ella le daba miedo que se pelearan y no se volvieran a hablar, que perdieran su inocencia o que cientos de kilometros se interpusieran entre sus juegos. Y ella solo deseaba que crecieran juntos y llegaran algun dia a enamorarse.

Luna...

Ven, abrazame otra vez

Quitate la ropa. Dejate solo algo para poder enganchar el mp3 y compartamos cascos.. Pon la canción que mas te guste pero que sea movida, de esas que al escucharlas necesitas quemar adrenalina. De esas que te hacen sentir libre, que te hacen dejarte llevar y pasartelo genial. ¿Ya la has elegido? Pues ahora dame la mano, pon la canción y empieza a correr. Arrimemonos todo lo que podamos a la orilla de esta playa y cuando el agua nos cubra los talones corramos. Saltemos, bailemos, cantemos... Lo que el cuerpo te pida. Besame, muerdeme, pegame , chillame, insultame, mirame todo el rato o no me mires en ningun momento pero haz lo que el cuerpo te pida. Grita mi nombre al horizonte o quedate callado si quieres. Cogeme de la cintura o alejate un poco y salpicame pero no me sueltes. Da rienda suelta a tus instintos, a tus ganas, a tus fantasias o simplemente dejate llevar por la musica. Canta! Canta muy alto y dejame hacerte los coros. Hagamos una coreografia personalizada con los pies enterrados o saltemos como locos..pero jamás me dejes que destrocemos la ilusión de un niño rompiendo su castillo de arena. Clavemonos las conchas rotas sin importarnos las heridas o enredemos nuestros pies en algas perdidas que visitan la orilla, y si nos caemos, despues de reirnos y revolcarnos en la arena,nos levantamos. Busquemos las olas y empapemosnos pero no dejes de sentir la musica. Si el reproductor se rompe usa la imaginación y sigue cantando. Pideme todo lo que quieras sin miedo que lo haré como si fuera el último dia d mi vida. Sonriamos juntos, hagamos el amor, discutamos, seamos felices aunque sea por un instante, dure lo que dure.. lo que sea pero conmigo.
Pero antes ven y abrazame otra vez..


Luna...

Grita !!

¿Sabeis ese sentimiento de tener algo dentro y no saber lo que es?? ¿Ese sentimiento que necesitas saber de que se trata para poder buscar una solución o disfrutar d ello si fuera bueno, ya que ni siquiera sabes si es agradable o te hace sentir mal, solo sabes que esta ahi, en tu tripa y por mucho que lo cuentes no se decide a abandonarte. Se ha hecho un sentimiento fiel a ti, te acompaña a todas partes y nunca disminuye esa intensidad.
Ahora mismo me encantaria coger el tren. Observar a todos los viajantes , sus sonrisas, sus miradas, ¿que hacen?, ¿donde irán? ¿se irán a encontrar con alguien que quieren? o quizas simplemente van o vienen camino del trabajo. Pero me encantaria observarles y preguntarmelo. Sobretodo me encantaria que ese viaje fuera hacia algun lugar bonito.. una montaña, o un desierto o quizas simplemente una playa que tuviera las casas muy, muy lejos para estar completamente sola. Mirar a la nada y escuchar mis sentimientos para asi quizás poder saber que está pasando. Sentarme en la arena o en la hierba y de repente levantarme y gritar. Gritar muy fuerte sin importar si mi voz es fea o desafino. Gritar hasta quedarme sin aliento hasta sacar todo lo que tengo dentro. Gritar, gritar, gritar y gritar sin que nadie juzgue mi locura. Y cuando me quedara sin gota de oxigeno respirar profundamente y sonreir. No parar de sonreir. Coger el tren de vuelta a casa y seguir sonriendo y que todos se pregunten porque, que todos piensen que escucho un programa de humor en la radio y la radio estar apagada. Que pinsen que leo uno de los mejores capitulos de un libro y el libro tener las hojas en blanco.. Y que en mis ojos solo se refleje una frase
"ya no tengo miedo a nada". Y llegar a la estación y encontrar alli el abrazo que mas estoy esperando. Y que ese abrazo no se acabe nunca...



...Luna...

Las dos caras de esa moneda llamada ...¿"corazón"?

Ella está sentada en ese banco. A su alrededor habitualmente se disfrutan los juegos de niños, que de vez en cuando , le dan con la pelota. Ella no se suele enfadar. Les sonríe siempre. Pero hoy no lo hace. Esos niños estarán en casa sentados frente a la tele, durmiendo o quizás teniendo alguna pesadilla que su madre calmará con un abrazo y un beso en la frente. Hoy sus niños del parque no están. Hoy está sola con sus pensamientos.
Ella piensa en él. Sonríe cuando se acuerda de las tonterías que tiene. De su manera especial de hacerla sonreír siempre. A todas horas. De cuando captura sus lágrimas al vuelo, la llama idiota y le cambia de tema.En esos momentos los dos olvidan y se ríen sin saber de que.

SE acuerda de los momentos que no ha aprovechado a su lado y se promete "la próxima vez".

Él , en cambio, no está solo. Hoy está muy bien acompañado. Una chica rubia, alta y de muy buen ver le da esas caricias que ella está echando en falta. Él la besa sin acordarse de ella ni un segundo.
Después de la jornada romántica con la chica fácil que se encontró en el bar de la esquina mientras tomaba la última cerveza del día (a la cual no cree que vuelva a ver), camina hacia su casa. Entonces si se acuerda de ella por un momento. Piensa en si llamarla mañana. NO! no la va a llamar mañana, mejor otro día que se aburra. Total ella siempre estará disponible y el tiene mucho donde elegir.

Ella ajena a sus pensamientos sigue sonriendo embobada con la mirada fija en la hierba, viendo como el viento la mece de un lado a otro. Cómo él cuando la mira.

"Ya es tarde mejor irse a casa". Se levanta y camina hacia su casa. Pensando en él. Siempre pensando en él.

Llegan a la vez a sus casas. Los dos miran esa noche la foto del otro. Pero hay una diferencia. Una gran diferencia....

Él mira la foto y se fija en sus ojos. Son bonitos. Marrones, pero bonitos. Piensa que quizás si la conociera se enamoraría de ella. Pero no! El no quiere eso. El quiere tener un record de besos por minuto y además es coleccionista de distintos sabores.

Ella en cambio no observa sus ojos. A ella le encanta su mirada. Ella no piensa que se enamoraría de él. Ella sabe que se está enamorando.

Luna...